En el barrio Tsukishima de Tokio los vecinos no podían dar crédito ante lo que veían. Y es que este anciano tiene de mascota a una tortuga gigante y ¡da paseos con ella! Esta imagen ha dado la vuelta al mundo. No contento con pasear a su monumental tortuga, el señor le ha colocado un vestidito de lunares rosa de lo más coqueto y él lleva un bolsito a juego con el traje del animal. ¡Vaya pareja para la Feria! Dueño y mascota pasean tranquilamente ajenos al asombro que causan.
La tortuga es un ejemplar de tortuga africana. Este tipo de tortugas pueden llegar a medir 80 centímetros y pesar cerca de ¡¡100 kilos!! Según los expertos en la foto se puede percibir que hay una confianza forjada entre ellos a base de años de amistad. Lo bueno de tener una tortuga gigante por mascota de 100 kilos es que es casi imposible perderla, ¿verdad?
