El ser humano es casi el único animal que se reconoce desde la infancia frente a un espejo. El fotógrafo francés Xavier Hubert Brierre sentía curiosidad y decidió hacer un experimento de lo más curioso: colocar espejos en la selva para observar la reacción de los animales.¡Hay de todo! Desde sustos a peleas y ¡¡algunos incluso se reconocen!!