Los japoneses siempre son los primeros en casi todos los inventos, ¿verdad? Y esta vez también han sido los primeros en inagurar el primer local que permite a sus clientes disfrutar de un café mientras acarician a alguno de los diez búhos que ha criado el dueño de este peculiar establecimiento. Fukuro no mori (Bosque de búhos, en japonés) es el restaurante donde cobran 7,80 euros a la hora, incluyendo una bebida, a aquel que quiera probar la experiencia.
Ya existían locales donde jugar con gatos, perros, conejos y hasta cabras, pero parece que este es el primero en el país asiático en el que se puede interactuar con estas aves.Tras dejar su empleo de taxista hace cuatro años, Yano, de 62 años, comenzó a criar aves de presa y a desarrollas su pasión por la cetrería. Finalmente acabó adquiriendo un local con una decena de ejemplares criados por él mismo, con ayuda de una incubadora y la mayoría tienen entre uno y dos meses de edad. ¿Estará funcionando el nuevo negocio?
