Y lo hizo entre lágrimas… Porque a pesar de estar contento con su nueva etapa en el Oporto, no deja de ser duro despedirse de su equipo del alma. Un equipo donde ha vivido 25 años compartiendo alegría y tristezas pero siempre agradecido de ser querido por todo el madridismo durante todos estos años.
Después de la rueda de prensa quiso despedirse de su aficción y estuvo unos minutos con ellos y cómo no, alrededor de todas las copas conseguidas como portero del Real Madrid.
Aquí te dejamos la rueda de prensa completa donde Iker se despide de su equipo del alma. Merece la pena verla porque como el dice “lo importante no es ser un buen o mal portero sino una buena persona”.
