Las chuches son algo que no tiene edad, ¡a todos nos gustan! Tanto mayores como pequeños disfrutamos de las golosinas como verdaderos entusiastas de las cosas buenas. Por eso, en Nueva York se ha impuesto una nueva moda: ¡chuches de lujo! Está claro que vender chuches es un negocio seguro.
Entre las tiendas más conocidas están la de la hija de Ralph Lauren, Dylan’s Candy Bar, que tiene todo tipo de dulce que te puedas imaginar, aunque a un precio que también te costará asimilar. La californiana Rossie O’Neill también está arrasando con su Sugarfina, en la que comercializa 140 variedades de dulce. Tiene tanto éxito la tienda ¡que hay lista de espera de semanas! ¡Y hay muchas más! Una cosa es segura, ¡y es que las chuches no dejan indiferente a nadie!
