En una residencia de ancianos en Seattle, EE.UU., decidieron instalar una guardería con niños preescolares. ¡¡El resultado es sorprendente!! Los niños se interesan más por las personas con discapacidades, aprenden sobre el envejecimiento, reciben atención y amor de los residentes y entienden que los adultos también necesitan ayuda. Y los adultos disfrutan ayudando a los peques, jugando con ellos y haciendo que el tiempo pase volando. ¡Es maravilloso!
En definitiva, ¡la vida de todos ellos ha cambiado por completo! Una gran idea para que llegue a todos los países del mundo.
¿Quieres ver un rato cómo se lo pasan? Pincha AQUÍ
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