Un estudio presentado en Chicago por la Asociación Americana de Psiquiatría confirma lo que muchos temían, que las personas amantes de tomarse “selfies” sufren de un trastorno denominado “selfitis”. ¡Era muy previsible! ¿Verdad? ¿Y qué significa exactamente este nuevo trastorno? Lo definen como el deseo compulsivo obsesivo para tomar fotos de uno mismo y publicarlos en los medios sociales como una forma de compensar la falta de autoestima y para llenar un vacío en la intimidad. Es decir, la necesidad imperiosa de colgar fotos contínuamente en las redes para demostrar a todo el que uno vale. Y aún hay más, se puede dar en tres niveles:
– Selfitis Borderline: tomarse fotos de uno mismo, por lo menos tres veces al día, pero sin llegar a compartirlas en sus redes sociales.
– Selfitis Aguda: tomarse fotos de uno mismo, por lo menos tres veces al día y luego publicarlas en sus redes sociales.
–Selfitis Crónica: tomarse fotos de uno mismo “sin control”, más de 6 selfies al día y compartirlos en sus redes sociales en repetidas ocasiones.
Los miembros de esta asociación han advertido de la gravedad del tema y de sus consecuencias. Así que ya sabéis y ¡advertidos estáis! Seguro que ahora no veis estas fotos tan divertidas y estáis pensando cuántos selfies os hacéis al día ¿verdad? Hay que estar un poco loco para hacer estas cosas por tener un selfie diferente…
