¡Y se lo ha ganado el apodo con creces! ¡Vaya ejemplo para todos los que le rodean! Esta es la historia de Charlie K., un hombre de Nueva Jersey que aprovechó el Black Friday para tener el mayor gesto de solidaridad que pudo con las familias de su comunidad. ¡Se gastó 8.000 euros en juguetes para doce familias de su localidad! Se fue a una tienda Toys R’ Us en la ciudad de Cherry Hill para comprar un regalo a su hijo y de pasó, ¡¡decidió pagar todos los pedidos que los clientes de la tienda habían reservado!! ¡¡60 pedidos!!
“Estoy tratando de llevar algo de felicidad a la gente, a la comunidad que me trajo la felicidad a mí y a mi familia”, declaró después aun medio. Y por si esto fuera poco, no quedó ahí la cosa, terminó comprando juguetes por valor de 1.700 euros para donarlos a Toy for Tots, una organización benéfica que lleva regalos de Navidad a niños cuyos padres no pueden costearlos. ¡¡Qué pasada!!
