¿Alguna vez has pensado que podrías tener en casa la bombilla más famosa del mundo? ¿Sabes cuántos años puede durar una bombilla encendida? En la ciudad estadounidense de Livermore, en California, hay una bombilla que ¡¡lleva encendida 114 años!!
La “famosa” bombilla fue fabricada en la década de 1890 y se colocó en una estación de bomberos en el año 1901. Desde aquel año sólo ha dejado de iluminar cuando han cortado la luz en la localidad, y en el año 1976 cuando la estación de bomberos fue trasladada a un nuevo edificio. En esta ocasión, tan sólo fue apagada 22 minutos durante la mudanza. Ante el reto que significaba desenroscar la bombilla de su casquillo por miedo a su rotura, los electricistas cortaron el cable y la “apreciada” bombilla fue transportada a su nuevo destino con escolta policial y en un coche de bomberos, bajo la atenta mirada de periodistas, vecinos y el capitán de la policía.
Nadie en la localidad podía imaginar que esta bombilla pasaría a la historia y superaría todas las adversidades, como varias crisis energéticas o el terremoto que asoló San Francisco en 1906. La “infatigable” bombilla ya está recogida en el Libro Guinness de los Récords como “la bombilla más longeva del mundo”.
La “famosa” bombilla fue fabricada en la década de 1890 y se colocó en una estación de bomberos en el año 1901. Desde aquel año sólo ha dejado de iluminar cuando han cortado la luz en la localidad, y en el año 1976 cuando la estación de bomberos fue trasladada a un nuevo edificio. En esta ocasión, tan sólo fue apagada 22 minutos durante la mudanza. Ante el reto que significaba desenroscar la bombilla de su casquillo por miedo a su rotura, los electricistas cortaron el cable y la “apreciada” bombilla fue transportada a su nuevo destino con escolta policial y en un coche de bomberos, bajo la atenta mirada de periodistas, vecinos y el capitán de la policía.
Nadie en la localidad podía imaginar que esta bombilla pasaría a la historia y superaría todas las adversidades, como varias crisis energéticas o el terremoto que asoló San Francisco en 1906. La “infatigable” bombilla ya está recogida en el Libro Guinness de los Récords como “la bombilla más longeva del mundo”.
