Este niño es el claro ejemplo de la naturalidad. En mitad de la boda se acerca a los novios, que precisamente son sus padres, y les suelta que se hace caca. La pareja, la mujer que oficia la ceremonia y los asistentes no pueden contener de reir. Una de las amigas de la novia se lleva al niño corriendo para que el pobre haga sus necesidades y la boda pueda continuar. La interrupción dejó claro a sus padres que las necesidades del niño son lo primero. ¡Que se vayan acostumbrando!
Interrumpe la boda porque ¡se hace caca!
0Este niño es el claro ejemplo de la naturalidad. En mitad de la boda se acerca a los novios, que precisamente son sus padres, y les suelta que se hace caca. La pareja, la mujer que oficia la ceremonia y los asistentes no pueden contener de reir. Una de las amigas de la novia se lleva al niño corriendo para que el pobre haga sus necesidades y la boda pueda continuar. La interrupción dejó claro a sus padres que las necesidades del niño son lo primero. ¡Que se vayan acostumbrando!