La historia de Emily James ha llegado al corazón de miles de personas en el mundo. Esta pequeña de 3 años, de Innisfil (Canadá), decidió donar su pelo y el de su muñeca, a una fábrica de pelucas. Con este gesto quería que su largo cabello pudiera servir de ayuda a los niños con cáncer. Y es que lo tuvo claro al ver las fotografías de los enfermos, “no quiero que ningún niño esté triste por no tener pelo… quiero darles mi pelo, porque tengo más”, así lo cuenta ella misma. ¡Vaya lección de solidaridad para todos!
¡Emily dona su pelo!
0La historia de Emily James ha llegado al corazón de miles de personas en el mundo. Esta pequeña de 3 años, de Innisfil (Canadá), decidió donar su pelo y el de su muñeca, a una fábrica de pelucas. Con este gesto quería que su largo cabello pudiera servir de ayuda a los niños con cáncer. Y es que lo tuvo claro al ver las fotografías de los enfermos, “no quiero que ningún niño esté triste por no tener pelo… quiero darles mi pelo, porque tengo más”, así lo cuenta ella misma. ¡Vaya lección de solidaridad para todos!
