Tuvo que sufrir acoso en el colegio para que este niño de 11 años decidiera, después de superarlo, dedicar unas horas a la semana a dar consejos “emocionales” a los adultos. Sí, lo que has leído, se llama Ciro Ortiz y por 2 dólares ayuda a las personas que le piden su opinión en el metro de Nueva York.
Ciro Ortiz comenzó a hacer de “terapeuta” porque sintió que todo lo que había aprendido de su mala experiencia podía ayudar transmitiéndolo a los demás. Y ni corto ni perezoso, coge una mesa y dos sillas y espera a quien quiera escucharle, que deben ser muchos ya que suele ganar una media de 50 dólares al día.
Según su experiencia cuenta que los adultos se asustan demasiado con los cambios que sufren en sus vidas. Y él les aconseja que los acepten, que la vida consiste en eso, en los continuos cambios y que no hay que mirar nunca atrás. ¿Y tiene que venir un niño a decirnos esto? ¡Bien hecho Ciro!
