El fin de semana pasado se celebró una boda de lo más interesante y esta vez no se trata de la boda de Leo Messi, sino la del alcalde de San Pedro de Huamelula, Víctor Aguilar, quien se casó ¡con un cocodrilo! Esta boda no es capricho del mencionado alcalde, se trata de una tradición centenaria para favorecer la pesca. Este rito simboliza la unión de dos pueblos indígenas de esta región mejicana, los chontales y los huaves o mareños. Estos dos pueblos se enfrentaron durante largo tiempo hasta que, según la tradición, el hijo del rey de los chontales y la hija del rey de los huaves se enamoraron y se casaron, acabando con los conflictos entre los dos pueblos. El alcalde de San Pedro de Huamelula representa al príncipe de los chontales, y la encantadora novia, el cocodrilo, a la princesa de los huaves. El cocodrilo es vestido de novia, con velo y todo, y paseada por la ciudad antes de la ceremonia. Después, se celebra la boda y los novios tienen que bailar. Desde luego, esperemos que la novia no quiera mucho al novio, ya sabes, por eso de que hay amores que matan...
¡Se casa con un cocodrilo!
0El fin de semana pasado se celebró una boda de lo más interesante y esta vez no se trata de la boda de Leo Messi, sino la del alcalde de San Pedro de Huamelula, Víctor Aguilar, quien se casó ¡con un cocodrilo! Esta boda no es capricho del mencionado alcalde, se trata de una tradición centenaria para favorecer la pesca. Este rito simboliza la unión de dos pueblos indígenas de esta región mejicana, los chontales y los huaves o mareños. Estos dos pueblos se enfrentaron durante largo tiempo hasta que, según la tradición, el hijo del rey de los chontales y la hija del rey de los huaves se enamoraron y se casaron, acabando con los conflictos entre los dos pueblos. El alcalde de San Pedro de Huamelula representa al príncipe de los chontales, y la encantadora novia, el cocodrilo, a la princesa de los huaves. El cocodrilo es vestido de novia, con velo y todo, y paseada por la ciudad antes de la ceremonia. Después, se celebra la boda y los novios tienen que bailar. Desde luego, esperemos que la novia no quiera mucho al novio, ya sabes, por eso de que hay amores que matan...
