David Ferrer, a sus 33 años y con más ganas que nunca, octavo en el ranking mundial. ¡¡Todo un ejemplo de superación!!
¿Soñabas desde pequeño con ser tenista profesional?
Sí, siempre soñé en ser profesional.
¿Jugabas al tenis todos los días?
Siempre que tenía un rato libre, allí estaba yo con mi raqueta.
Y de estudiante, ¿seguías jugando fuerte?
Sí, siempre intentaba compaginar los estudios y el tenis.
¿Cuántas raquetas tienes ahora en tu casa?
Guardo muchas raquetas, son recuerdos de mi carrera y me hace ilusión tenerlas.
Al viajar tanto, ¿qué es lo primero que metes siempre en la maleta?
A parte de lo que necesito para jugar, un libro.
¿Por qué te llaman Ferru?
Viene de la época que estuve entrenando en Barcelona, un entrenador que tuve me empezó a llamar así.
¿Tienes buenos amigos dentro del tenis?
Sí, convives mucho con tus compañeros y eso hace que surjan relaciones de amistad.
Dicen que tu juego se caracteriza porque nunca das un punto por perdido. ¿Eres así también en la vida?
En la vida todo cuesta mucho y si no luchas, es difícil conseguir tus objetivos.
¿Cuál crees que ha sido tu secreto para llegar a ser octavo en la clasificación mundial?
No hay secretos, esfuerzo, constancia e intentar mejorar cada día.
¿Cambia mucho la vida estando el octavo del ranking mundial?
Mi vida es la misma, cada semana, torneos y viajes.
Si miras hacia atrás…. ¿en qué has cambiado como jugador?
He madurado mucho como persona y esto me ha aportado mucho al tenis.
Muy personal…
Tu manía antes y después de los partidos: No tengo manías.
Tu peor contrincante: El que mas veces me ha ganado y nunca he podido ganarle, Roger Federer.
Tu mejor contrincante: No hay contrincante fácil.
Tu frase más repetida: No te rindas.
Tu sueño cumplido: Ser tenista.
Tu sueño por cumplir: Quizás ganar un Gran Slam.
